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En sus 21 años de existencia, la escuela Benjamín Herrera Angulo, ha sido la segunda casa para miles de escazuceños. Foto Marco Roldán / Archivo El Informador de Escazú
Artículo principal - Edición No. 323 - marzo de 2017
Una escuela con miras hacia un mejor porvenir
De nuestros archivosPublicado en junio de 1988
Por Marco Antonio Roldán
En marzo de 1966 se empezó la construcción de lo que hoy es la escuela Benjamín Herrera Angulo. En diciembre del mismo año, se concluyó el primer pabellón, constituido por cinco aulas.
En marzo de 1967 tuvo lugar la inauguración del nuevo centro de enseñanza primaria, al que se le dio el nombre de Escuela República de Venezuela No. 2. Ocho años más tarde, en 1975, se le cambió el nombre por el actual.
Hoy día, el centro educativo cuenta con 21 aulas, distribuidas en cuatro pabellones y en las que se incluye la dirección, cocina y la sala de profesores. El presente curso lectivo está integrado en esta escuela, por un total de 874 estudiantes.
Treinta y dos maestros laboran en la institución; veintitrés son de primero y segundo ciclo, cuatro de asignaturas especiales, cuatro de kinder y uno de enseñanza especial.
Situación económica
La directora del centro educativo, Licda. Haydée Araya Cascante, comentó que la situación económica de la institución es mala, condición que les ha impedido atender el problema de la falta de sillas y pupitres, que este año se hizo más difícil al haber aumentado el número de estudiantes con respecto al año anterior. “Es tan crítica la situación, que tenemos hasta cinco niños en dos pupitres”, indicó la funcionaria.
Dijo además, que para solventar la carencia de sillas, han tenido que utilizar bancas, y que al no contar estas con respaldares, temen que pueda ocasionar perjuicios en la columna vertebral de los estudiantes.
Manifestó que el Ministerio de Educación Pública no les puede ayudar a solucionar esta circunstancia, por no contar con presupuesto, en vista de que el problema se presenta en la mayor parte de las escuelas del país.
Soluciones
Doña Haydée Araya destacó “que hay mucho que hacer en esta institución”, sin embargo, añadió que los problemas se resolverán poco a poco. Para este fin, pretenden organizar mini ferias y bingos con el propósito de recaudar el dinero necesario.
Mientras tanto, el asunto al que se le dará mayor prioridad en resolverlo, es el de la falta de pupitres y sillas, pues la situación ha llegado a tal extremo, que en ocasiones hay niños que tienen que sentarse en el suelo.
Una dificultad que los ha afectado desde la fundación de la escuela, es el suministro de agua potable, ya que dependen del Liceo de Escazú, pues con el agua de ese lugar llenan un tanque, que constituye la única fuente de donde obtienen el líquido. Están en espera de que la Municipalidad de Escazú les solucione el inconveniente instalando una entrada de agua propia.
Entre los proyectos para el futuro, figuran la construcción de un pabellón exclusivo para el kinder, pues en la actualidad utilizan aulas mezcladas con las de los grupos escolares, lo cual consideran inadecuado. Se pretende también construir un salón de actos, que además serviría como sitio de recreo para los niños. Actualmente, los actos cívicos se llevan a cabo en los corredores de dos pabellones.
La Directora se mostró muy complacida por el trabajo tenaz que realizan los miembros de la junta de educación y el patronato escolar, quienes han puesto todo su empeño en resolver los problemas que enfrenta la institución, así como del importante aporte que brindan los padres de familia mediante sus contribuciones económicas.
Computadoras abren camino en Escuela Venezuela
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Según el Director, las computadoras contribuirán a que los niños se familiaricen con la tecnología del futuro.Foto Marco Roldán / Archivo El Informador de Escazú
De nuestros archivosPublicado en marzo de 1988
Por Marco Antonio Roldán
Veinte computadoras IBM, modelo 25, y una impresora, fueron donadas a la Escuela República de Venezuela, para uso de los 1200 alumnos que integran este centro de enseñanza.
El aporte lo hizo la Fundación Omar Dengo, organización dirigida por la señora Clotilde Fonseca de Pacheco, esposa del señor Ministro de Educación, y secundada por otros funcionarios ligados a la labor educativa, aunque no propiamente del Ministerio.
El director del centro educativo, Lic. Manuel González Cornejo, quien desde marzo del año pasado ocupa el cargo, dijo que en noviembre anterior, cuando recibieron la propuesta de incorporar las computadoras al plantel, se tropezaron con el problema de no contar con aulas disponibles para acondicionar un buen laboratorio de teoría y práctica.
Ante esta situación, decidieron tomar dos de las cuatro aulas ocupadas por el kinder, y turnar los cuatro grupos preescolares, dos por la mañana y dos por la tarde.
Tres maestras tienen el cargo de dirigir a los estudiantes en el uso de las computadoras, y a cada sección de la escuela se le brinda la oportunidad de visitar dos veces por semana el laboratorio.
González comentó que los alumnos manipulan las computadoras utilizando el lenguaje “logo writer”, que es especialmente para niños. “Ellos no van a aprender computación igual como se enseña en una escuela comercial, sino que simplemente aprenderán a maniobrarlas con objetivos educativos y de preparación en el campo de la informática”, enfatizó.
El funcionario añadió que para un futuro cercano se tiene previsto poner a disposición de la comunidad este laboratorio.
Proyectos
Entre los proyectos más ambiciosos que pretende la institución, está el de adquirir un pedazo más de terreno, con el fin de agrandar la planta física, para darle cabida a un comedor y una biblioteca más espaciosos.
El señor Director se refirió a la situación económica del centro educativo, la cual dijo que es estable, aunque no siempre se cuenta con el dinero necesario para todo lo que se planea.
Clínica dental
Desde el año pasado funciona una clínica dental en la escuela, que anteriormente estuvo en el Centro de Salud y que atendía al público en general. El traslado de la misma se debió a la nueva política del Ministerio de Salud, que dispuso trasladarlas a las instituciones educativas.
El consultorio atiende solamente estudiantes de la Escuela República de Venezuela y de la Benjamín Herrera y se financia con contribuciones voluntarias de los niños que son atendidos, además de aportes económicos de padres de familia, y con un porcentaje del dinero recaudado en la matrícula de la primera escuela.
Por otra parte, el Sr. Manuel Araya Zúñiga, vicepresidente de la Junta de Educación de Escazú, expresó que la clínica dental fue una realidad gracias al dinero recaudado en las actividades del Centenario, en noviembre de 1986, en la cual gran cantidad de exalumnos colaboraron comprando los “Bonos del Centenario”, que consistían en un diploma recordatorio, en el que se incluía el nombre del egresado que lo compraba.
Tanto el Director, como el Sr. Araya, se mostraron sumamente agradecidos con los padres de familia, que con sus contribuciones y el dinero que otorga el Estado a través de la Junta de Educación, hicieron posible la clínica dental y el laboratorio de cómputo.
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